En su tercer año de implementación, el programa Yogurito Escolar Misionero ya alcanza a unos 3.500 alumnos de escuelas primarias de las localidades de Colonia Aurora, Alba Posse, Santa Rita y El Soberbio. Se trata de una iniciativa impulsada en forma conjunta entre el Ministerio del Agro y la Producción y la Cooperativa Alto Uruguay Limitada (Caul). El programa funciona como complemento alimentario de niñas y niños de esas localidades.
En sus inicios, la distribución del yogur se realizaba en escuelas de Colonia Aurora tres veces por semana. Se trata de un lácteo enriquecido con probióticos que se distribuye en forma gratuita a alumnos de escuelas de nivel primario.
El exitoso programa cuenta con el apoyo del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) a través del Centro de Referencia para Lactobacilos (Cerela), que aporta los probióticos para el yogur que produce la Caul.
Actualmente, se procesan en las instalaciones de la planta de elaboración de productos lácteos Caul, un volumen equivalente a 1.500 litros de yogur sabor vainilla por semana.
Durante el mes de julio se realizaron la evaluación antropométrica, de capacitación y educación a alumnos de sexto y séptimo grado de las diferentes instituciones escolares, para que puedan ser repicadores en grados inferiores del programa Yogurito Escolar Misionero y la importancia de los alimentos lácteos.
Procesamiento
El yogur se realiza con leche de vaca de productores zonales, que en el control se registra una acidez de 16° Dornic. Se pasteuriza la leche, e inmediatamente pasa a la descremadora.
El siguiente paso es pasar la leche a las tinas de fermentación, donde se enfría hasta los 45°C, para agregar los fermentos lácticos junto con el azúcar.
Una vez adicionados los componente necesarios para el desarrollo del coágulo, comienza la incubación manteniendo la temperatura durante aproximadamente 3 horas. En este periodo, la acidez de la mezcla va aumentando por acción de las bacterias presentes en la leche y de las adicionadas luego, los que provocan que la mezcla se vuelva más espesa, brindando la consistencia característica del yogur.