El concejal del PRO Diego Barrios cree que más allá de la debacle electoral de Juntos por el Cambio en Posadas, están tendidas las bases para que se consolide una oposición sólida que le dispute el poder a la Renovación. Pidió que más comerciantes y empresarios se animen a incursionar en política y que todos los sectores deben unirse para la elaboración de un plan de desarrollo económico para la capital provincial.
En una entrevista con ENFOQUE, elogió la autocrítica de Mauricio Macri al reconocer errores, pero criticó que en la administración nacional hubo sobreestimación de habilidades y subestimación de los problemas económicos y sociales endémicos de la Argentina.
¿Cómo hizo para compatibilizar la actividad laboral privada con la política?
Cuando decido, hace unos seis años, incursionar en política, ahí empiezo a pensar cómo lo iba a hacer. Entonces comienzo a organizar la parte operativa de las empresas, para que estuviera bien armado el equipo de gente. Y eso no se dio de un día para el otro. Entonces vos podés participar todo el tiempo en lo estratégico, en lo importante, y liberarte de lo operativo. Lo que hice no fue blanco o negro, sino un proceso. Eso hizo que actualmente tenga poco más de la mitad del tiempo abocada a mi función de concejal y el resto a la actividad privada. Siempre estoy en contacto con los responsables de cada área de las empresas, uso mucho la tecnología. Hoy por hoy en el celular está todo. Veo en tiempo real qué ocurre con las empresas.
¿Cuál fue la reacción de la familia cuando comunicó que iba a trabajar en política?
No estaban convencidos ni antes, ni ahora. Mis familiares piensan que puedo hacer más por la sociedad desde las empresas. Mi padre es el que más me apoyó. Incluso los compañeros de trabajo no quedaron muy contentos con la decisión. Más que nada por temores, porque la política es complicada y la situación podía complicar a las empresas. Y de hecho ha pasado. Pero bueno, por mi forma de ser necesito experimentar y mirando para atrás, la experiencia que hice en política me ayudó mucho como persona y también para la gestión empresarial. Fue una cosa totalmente positiva. Creo hacer desde el Concejo mi aporte para la sociedad, como el control del Ejecutivo o la participación activa en las comisiones del Deliberativo.
¿De qué manera se adaptó al Concejo?
El primer año me costó. Invertí mucho tiempo con un resultado menor del que esperaba. En el segundo, me siento mejor, encontré el camino para lograr resultados. También se consolidó el equipo de trabajo. Está bueno que en el Deliberativo o en la Cámara de Representantes haya participación de personas que llegan del sector privado, para que haya un estado más eficiente, liviano, amigable con el desarrollo económico. En Encarnación, Paraguay, por ejemplo, de 12 concejales, 7 son comerciantes tradicionales. Si eso no se da así en Posadas, es porque el comerciante o el empresario no participa en política.
Y como yo nunca dejé de participar en la Cámara de Comercio e Industria, les cuento a los colegas cómo es todo desde la política, cómo nos ven, incluso hice en más de una ocasión análisis críticos del sector. Al participar políticamente uno tiene una visión más integral de cómo funciona la sociedad. Sólo desde el comercio uno puede llegar a tener una visión sesgada. Entonces cada vez comparto más mi experiencia y siento que también hago mi aporte ahí, para generar una reflexión diferente.
¿Qué es eso a lo que más le costó adaptarse?
Entré con ganas de cambiar todo lo que no me gusta, sobre todo yo que soy idealista. Pero resulta que es una lucha muy difícil. Puntualmente no me gusta el uso discrecional de los impuestos y la falta de transparencia. Esto permanentemente vengo planteando y creo haber conseguido algunas cosas en ese sentido. Por ejemplo, por primera vez en la historia del municipio está publicado digitalmente el balance, con 7.000 fojas, de los gastos del Ejecutivo. No en la página oficial, sino en mi fan page de Facebook. Fueron dos años de insistir, pedir.
También a la hora de aprobar el Presupuesto, pedí un poquito más de detalles, no tantos totales donde después no se puede ver dónde se gasta el dinero.
Otro caso es del Sistema de Estacionamiento Medido. En otros lugares de la Argentina, el servicio se contrata directamente con la Universidad de La Plata al 4%. Acá se hizo a través de un intermediario, que no digo que está mal, pero estamos pagando un 26%. Y se decidió a través de una contratación directa. No juzgo a nadie, pero por qué no agarramos ese dinero y lo ponemos en otro lugar donde está faltando, como en los CAPS, por ejemplo. En un año se podrían ahorrar cuatro millones de pesos si se cambia la forma de contratación del SEM.
Esas cosas son las que pido, reclamo, en buenos términos. El Estado podría funcionar muchísimo mejor si fuera más ágil, más liviano, más transparente. Creo que recursos sobran, tanto económicos como humanos. Y cuando digo sobran recursos humanos, no hablo de despedir gente, sino hacer con ese personal un montón de cosas hoy tercerizadas. Se tiene la capacidad técnica y profesional para hacerlas. En la cobranza de morosos, por ejemplo, se gasta mucho dinero que podría quedar en las arcas del municipio, para comprar maquinarias, asfaltar o empedrar calles.
En el caso de la contratación de luminarias, tenía información de que en otros municipios se habían pagado casi 20 mil pesos por cada una. Y como yo soy de ese rubro en lo comercial, sé que vale la mitad de eso. Y como el Concejo intervino pidiendo el contrato que se hizo en Posadas para analizarlo, se terminó pagando 10 mil pesos. Finalmente la contratación se hizo a un precio razonable.
¿Cómo es trabajar en la oposición en Posadas?
A mí siempre me gustó discutir al Poder, no solo del Estado, sino en todos los ámbitos. Si se comete un hecho autoritario o injusto, me gusta intervenir para corregir eso. Eso lo vivo también de esta manera. Como decía, en este segundo año en el Concejo, aprendí a consensuar, a dialogar más con el oficialismo. Si la iniciativa en análisis es buena para la sociedad, acompaño. Rara vez no lo hago. Y si no firmo, explico bien por qué.
¿Qué temáticas de la ciudad son las que más te preocupan?
En mi experiencia laboral aprendí que todo lo que sucede es la consecuencia de algo. Si algo no funciona, hay que buscar su origen. Con el paso del tiempo se ha desnaturalizado el funcionamiento del municipio y está como muy anárquico. Entonces, una habilitación comercial puede demandar 8 meses o 1 año. Un reclamo de un vecino no llega a un circuito ordenado de gestión. No se sabe la planificación para las obras de la ciudad. Es todo por “contactos”, vos le conocés a alguien y conseguís lo que necesitás.
En general, la cosa no funciona porque el municipio se ha convertido en una herramienta de poder político. Cada vez hay más gente, pero la gestión está desordenada. Creo que ahí donde el cambio debe operar a fondo, se deben ocupar herramientas modernas de gestión, debe haber trasparencia, para mejorar la calidad de la ciudad de manera extraordinaria. Plata hay, empleados hay. El Estado tiene que funcionar como tal y no sólo para las elecciones, para sostener la militancia. Fijate a lo que ha llegado el Concejo Deliberante, con 1200 empleados. En el mundo no hay cuerpo similar con igual cantidad de personal. Hice mis cálculos y tenemos el Concejo Deliberante más caro del mundo. Somos más caros que un diputado de España. ¿Buscar un culpable? No, lo que digo es ver cómo se llegó hasta acá. Se ha utilizado al Estado como una salida laboral discrecional, donde los servicios no funcionan.
¿Cómo es el diálogo con los vecinos?
Por mi trabajo en el comercio siempre tengo diálogo con los habitantes de Posadas. Pero con la política eso se potenció. Te ven y permanentemente viene el pedido de la solución a un problema. De lo que se les ocurra. En cada barrio hay una problemática diferente. Uno de los más recurrentes es el del alumbrado público. Se iluminan las avenidas, pero el interior de los vecindarios presenta un abandono importante. Eso está cedido a EMSA. De hecho hay muchas cosas en las que el Municipio ha cedido terreno, como en el transporte público de pasajeros. No es así en ningún lugar de la Argentina. Es las demás provincias, el Concejo Deliberante define las concesiones, entrega las líneas y fija las tarifas.
Otra queja reiterada es el de los puntos de recarga de la tarjeta SUBE. En otros distritos hay uno cada 400 o 600 personas. En Posadas, hay 70 puntos que funcionan. En ciudades parecidas, hay más de 400.
Hay un poco de anarquíaen la ciudad, pero no empezó de un día al otro. Y de esta situación tenemos que salir entre todos, oficialismo y oposición, para lograr una Posadas mejor. Espero que Leonardo Stelatto, en su administración, abra un poco más la gestión al Concejo. Con Joaquín Losada hubo un par de reuniones y luego no volvieron a repetirse.
Tiene que haber un plan de desarrollo económico de Posadas, sin eso no vamospara ningún lado. Y tiene que ser de todos los partidos políticos y las instituciones intermedias. Actualmente hay un buen diálogo entre todos los espacios políticos en el Concejo y creo que es un buen momento para plantear esto.
¿El arrastre nacional o lo que hicieron los dirigentes locales de Cambiemos hizo que se perdiera el caudal de votos que cosecharon en 2017?
No es lo mismo cuando se vota una legislativa o una general. Y creo que hasta que haya un frente opositor que a la vista del elector sea sólido y tenga aspiraciones de gobernar realmente y no sea solo la suma de individualidades, va a ser difícil disputarle el Gobierno a la Renovación. Por eso pido formar una oposición consolidada, firme, eliminar las individualidades como proyecto. Creo que están sentadas las bases con esto que hicimos con Cambiemos, con Juntos por el Cambio.
¿Te sorprendió la diferencia entre Juntos por el Cambio y el Frente de Todos?
Teníamos en claro que íbamos a perder en las PASO, pero no por una diferencia de 15 puntos. Ninguna encuesta acertó eso, la única real fue la de las Primarias, que ofició de gran encuesta.
El sector comercial apoyó a Cambiemos en su momento, ¿cómo están ahora allí los ánimos con la crisis económica que se vive?
Considero que está igual, porque el motivo por el que le votó a Cambiemos no era económico y eso sigue firme. Tiene que ver con la defensa de la República, de ser más razonable, de cómo utilizar los recursos públicos, de lograr un Estado más liviano.
¿Le defraudó la gestión de Mauricio Macri?
Lo peor que nos pasa a los seres humanos es el exceso de confianza. Hubo una sobreestimación de las habilidades y una subestimación de los problemas que aquejaban a la Argentina. Y ahí está el motivo por el que no se pudo hacer una buena gestión. Es como tener un mal diagnóstico de tus capacidades y de la realidad. Esas dos cosas se encontraron y derivó en esto. También hubo problemas financieros importantes en el mundo que nos pegaron y como estamos tan débiles, nos afectó mucho.
Artículo publicado en la edición N° 49 de Revista ENFOQUE