En el primer semestre del año los trabajadores del sector privado formal en la Argentina recibieron aumentos salariales 14 puntos por encima de la inflación, de acuerdo a la consultora Mercer.
Resuelto ya ese ajuste por inflación y con proyecciones a la baja, ¿podrían las grandes compañías este año volver a esa «vieja práctica» de dar alzas de sueldo extra por mérito o desempeño a ciertos empleados en lugar de tener que pensar en dar aumentos generalizados para cubrir la erosión del poder adquisitivo?
En la Argentina de la inflación de tres dígitos anuales, esa práctica casi que se había disuelto y permanecía solo en algunas compañías y para algunos casos puntuales de ejecutivos de alto rango o «top talent» de áreas clave. ¿Podría cambiar eso en lo que queda de 2024?
Mercedes Bernardi, gerente SR de Desarrollo de Nuevos Negocios en Mercer Argentina, Uruguay y Paraguay, dijo que aún es demasiado pronto como para anticipar un cambio en ese sentido. «Pero si es esperable que a medida que la inflación sea menos protagonista en la definición de incrementos, la selectividad comience a ser más preponderante. Por ahora, los incrementos vienen siendo poco selectivos»,añadió.
Hasta el momento, según Mercer el 87% de las empresas brinda aumentos de manera uniforme para toda la población laboral, mientras que un 13% ya opta por incrementos selectivos, enfocándose en niveles jerárquicos, talentos clave o áreas específicas.
Por cuánto le ganaron los sueldos a la inflación
Según Mercer, en el primer semestre de 2024 los sueldos de empleados registrados del sector privado crecieron 14 puntos por encima de la inflación oficial. Hasta julio de 2024, los incrementos salariales acumularon en promedio 101% en tanto que la inflación considerada por la firma en el período fue de 87 por ciento. A la vez, se mantiene como prevalente la modalidad de ajustes bimestrales, 6 por año en total.
La información surge de un relevamiento realizado por la consultora experta en remuneraciones y beneficios entre 501 empresas grandes y filiales de multinacionales que operan en el país.
A la vez, las expectativas de inflación que manejan las empresas pasaron de casi 200% a principio de año a 148% ahora. En consonancia, los presupuestos salariales también se vienen ajustando a la baja y se ubican ahora en 154% anual de media. Esta reducción en las expectativas inflacionarias ha influido directamente en la disminución de los presupuestos de incrementos salariales para los próximos años. De hecho, la proyección de incrementos salariales para los últimos dos trimestres de 2024 presenta una leve disminución en comparación con el relevamiento de Mercer de julio.
Por eso, es probable que a las compañías con aumentos salariales aprobados por sobre esa cifra cuenten con margen como para volver a maniobrar aumentos por mérito que motiven a los talentos a conseguir mejores resultados, y no solo a proteger su poder adquisitivo.
Para los aumentos generales que se dan a todo el personal, las empresas adoptan diversos criterios para definir los incrementos salariales. Un 57% de las compañías considera una combinación de factores para determinar los aumentos: mientras que un 16% traslada la inflación en su totalidad (100%), otro 16% se basa exclusivamente en las condiciones del mercado, un 7% aplica lo establecido en los Convenios Colectivos de Trabajo (CCT), y un 5% traslada la inflación de manera parcial.
En cuanto a la dispersión de incrementos salariales entre industrias, el relevamiento muestra una disminución en la brecha entre los máximos y mínimos, pasando de 59 puntos porcentuales en la edición anterior de la encusta a 40 puntos en esta última.
«El 2024 trae una dinámica distinta para las organizaciones. Por primera vez en mucho tiempo estamos frente a un escenario en el cual los incrementos salariales superan a la inflación, tanto los otorgados hasta hoy como los proyectados hasta diciembre. Esto significa un recupero parcial del poder adquisitivo. Si embargo, todavía está lejos de compensarse la perdida significativa ocurrida en los últimos años».
Sueldos 2025
Para 2025, solo el 9% de las compañías consultadas por Mercer definieron ya un presupuesto de incrementos salariales.
El promedio de alza que consideran para ese año es de 65% anual.
Fuente: Iprofesional