El índice de acciones brasileñas Bovespa cayó un 3% este jueves, renovando su mínimo en el año, presionado por la coyuntura externa y la gran incertidumbre por los comicios presidenciales de octubre. En el mercado cambiario, en tanto, el real se desvalorizó un 2,3% a 3,9258 unidades por dólar.
El Bovespa retrocedió un 2,98% a 73.851 puntos, su menor nivel de cierre desde diciembre del año pasado. En el peor momento de la rueda llegó a caer un 6,5% a 71.161 puntos, un piso intradiario desde el 16 de noviembre. El volumen financiero de la sesión sumó 20.400 millones de reales, muy por encima de la media diaria de 2018 de 11.800 millones.
El índice, que se desplomó un 11 por ciento en mayo, ya suma una baja de un 3,8% en lo que va del mes.
De acuerdo con el estratega Carlos Sequeira, de BTG Pactual, el empeoramiento en la situación de algunos mercados emergentes y preocupaciones por el aumento de inflación y de las tasas de interés en Estados Unidos han minado la confianza de los inversores, lo que se suma a las preocupaciones por el escenario electoral a nivel local.
En el exterior, el índice MSCI de acciones de mercados emergentes cerró casi estable.
Los papeles de Vale cayeron un 3,03 por ciento pese al alza de los precios del mineral de hierro en China. Las acciones preferentes de Petrobras bajaron un 3,5% pese al alza de los precios del petróleo en el mercado internacional.
El descenso de los papeles líderes fue el principal lastre del Bovespa. Itaú Unibanco cayó un 2,91 por ciento y Bradesco un 1,77 por ciento. En tanto, los valores de Santander y del Banco do Brasil se desplomaron un 5,41 y 4,01 por ciento, respectivamente.
Fuente: Ambito
