El oficialismo sigue enfocado en incrementar las capacidades del aparato militar y fijó un amplio esquema de compras y desembolsos en el proyecto de presupuesto 2025 presentado por el presidente Javier Milei el último fin de semana. Dentro de la denominada Jurisdicción 45, que concierne al Ministerio de Defensa, la gestión libertaria anticipó su intención de destinar cientos de millones de dólares a la adquisición de submarinos, fragatas, vehículos blindados 8×8, fusiles y ametralladoras, y una flota de aviones de transporte. Al mismo tiempo, el Gobierno avanzará con el desarrollo o remodelación de construcciones para albergar los cazas F-16 comprados a principios de año. La cartera de Defensa continúa negociando la compra de un lote de helicópteros Black Hawks estadounidenses pero con actualizaciones posteriores llevadas a cabo por firmas israelíes.
El proyecto de presupuesto 2025 incluye, por ejemplo, la intención de destinar más de U$S 2.310 millones, con un plazo de amortización de tres años, para la «recuperación de capacidad submarina».
En ese sentido, el Gobierno procurará la incorporación de tres submarinos de tipo Scorpene o Clase 209, desarrollados por la francesa Naval Group y la alemana ThyssenKrupp Marine Systems (TKMS), respectivamente.
Presupuesto 2025: fragatas y blindados, ¿compras de armamento se vienen?
Además, el oficialismo propone orientar otros u$s1.400 millones para la adquisición «de dos unidades navales de superficie –Fragatas– para protección del núcleo de una fuerza naval». En simultáneo, se buscará promover la construcción de dos buques de transporte a partir de un monto base del orden de los u$s81 millones.
La incorporación de vehículos blindados 8×8 para el Ejército también está entre las prioridades del Gobierno para el año próximo. Para ese caso se plantean desembolsos por algo más de 380 millones de pesos. En cuanto a la tecnología en evaluación, las Fuerzas Armadas se debaten entre los VCBR 8×8 de la empresa estadounidense General Dynamics modelo LAVIII/Stryker y los VCBR Guaraní 6×6 de Brasil.
Según un informe detallado de Zona Militar, en paralelo a estas compras se destinarán fondos a la «adquisición de nuevos cascos balísticos, chalecos antibalas, fusiles, ametralladoras y lanzagranadas».
«En la Dirección de Aviación del Ejército, el Proyecto de Ley de Presupuesto incluye nuevamente el demorado programa de incorporación de helicópteros medianos, con una inversión de $ 657.422 millones repartida entre 2025, 2026 y 2027. También se menciona la recuperación y modernización de una aeronave CASA C-212, matrícula AE-265», añade la plataforma.
Para la aviación naval se estipula un gasto de casi u$s100 millones que tendrán como destino la compra de helicópteros ligeros, mientras que el Presupuesto 2025 contempla inversiones superiores a los $23.330 millones para la generación de obras en la VI Brigada Aérea de Tandil que recibirá a los aviones F-16.
El Gobierno insiste con los helicópteros Black Hawk
Por último, el Gobierno intensificará sus esfuerzos por sumar un mínimo de 10 helicópteros Black Hawks fabricados por los Estados Unidos y actualizados por compañías militares de Israel. Si bien en una primera instancia se habló de un precio de u$s2 millones por aeronave, el costo sería muy superior por la modernización que llevaría a cabo la empresa hebrea Elbit Systems.
Los Black Hawks en cuestión son parte de un remanente de 51 UH-60L que la Armada de los Estados Unidos anticipó que quitaría de servicio.
La intervención de Elbit Systems respondería no sólo a los renovados lazos militares del Gobierno con Israel, sino también a que la firma adaptó una flota de helicópteros estadounidenses a los requerimientos de la Armada de Israel. Además, la compañía tiene a su cargo la actualización prevista para 74 tanques TAM de producción nacional.
De incorporarse los helicópteros, la idea del Gobierno es que la compañía israelí haga la modernización en instalaciones ubicadas en Campo de Mayo.
Fuente: Iprofesional
