Los dispositivos en todo el país cambiarán por completo el modo en el que operan, con la incorporación de pantallas táctiles e interactivas que se mueven y pasan de una opción a otra, a semejanza de una aplicación para teléfono celular.
«Siempre tratamos de ver qué le puede sumar valor a la red y hacer más fácil la vida al usuario», indicó a Télam, Sebastián Bottcher, gerente comercial de Prisma, grupo propietario de Banelco.
Explicó que «dentro de todas las tareas asociadas a manejar la red de cajeros, siempre está la de mirar cuáles son las últimas tendencias y novedades que aparecen en el mercado», y precisó que «este software lo emplean otras redes de cajeros en el mundo».
«Se trata de una navegación más sencilla, con menos cambios de pantallas pero más opciones, y un funcionamiento más intuitivo. Es más parecido a cómo interactuamos con los teléfonos inteligentes», subrayó Bottcher.
Estimó que «para las nuevas generaciones será más fácil de adoptar porque es a lo que están acostumbrados: pantallas que se tocan y pasan de un lado al otro», y añadió que «para el banco el beneficio pasa porque se unifica el sistema de toda la red, optimizando el servicio y mejorando aún más la calidad general de Banelco».
«Tenemos en producción un par de equipos desde setiembre del año pasado, y tenemos un plan agresivo para renovar este año toda la red», indicó el ejecutivo.
También adelantó que en el laboratorio de la firma ya se probó «una solución para que el usuario pueda ir al cajero con su tarjeta y en lugar de poner su clave, coloque su dedo y con la huella digital pueda realizar las extracciones».
«Será muy beneficioso para clientes en general, pero para jubilados en particular, que ya lo hacen con Anses, y no deberán recordar su clave para operar», remarcó Bottcher, quien destacó que «ya hay bancos muy interesados y piden soluciones con esta modalidad. En pocos meses ya tendremos un cajero en condiciones de operar con la huella digital».
