Carlos Fernández (61) siente un gran orgullo al poder estar a cargo de la intendencia en el 90° aniversario de la ciudad de Oberá. Lo movilizan recuerdos como su infancia en Vila Svea y la primaria en la Escuela N° 84. Desde allí lo traemos al presente de la Capital del Monte.
Le consultamos sobre qué fue lo más destacado de estos dos primeros años de gestión y señaló. “He resaltado muy claramente el hecho en que en dos años hemos logrado desendeudar el municipio de la deuda que venía arrastrando de la gestión anterior. Lo hicimos a través de una administración mucho más austera, donde desde el día número uno hemos ahorrado de alguna manera en sueldos jerárquicos, porque de las 7 secretarías las redujimos a 3 y de los 17 directores tenemos 7. Hemos hecho un ajuste muy importante y eso ha llevado a que el equipo se haya recargado en un montón de tareas asumidas, pero que el objetivo trazado logró su efecto en el hecho que pudimos en los dos primeros años, que creíamos que fueron los más difíciles, tener un superávit positivo en los balances de la municipalidad”, manifestó Fernández en una entrevista con ENFOQUE.
En ese sentido, y abonando la idea de preservar los recursos del municipio, utilizaron el «Fondo de la Soja», invirtieron en la renovación del parque vial, donde adquirieron más de 25 unidades entre camiones, motoniveladoras, equipo pesado y liviano renovados, como también unidades para transporte de personal; todo eso a través de licitaciones públicas, abiertas y al contado.
En cuanto al equipo de trabajo nos contó que desde el comienzo y por su profesión apostó a darle un lugar preponderante a la juventud, educada y profesionalizada “que es el futuro que nosotros debemos encarar, no solamente en nuestra localidad, yo creo que el proyecto misionerista, ese refresh del cual hablamos, lleva a esto de que la juventud dé los pasos necesarios para que podamos caminar una política distinta”, expresó.
Para explicar cómo lograron balancear las cuentas municipales Fernández resaltó el acompañamiento por parte de los proveedores y de los obereños que cumplieron con sus obligaciones impositivas, en un 34% de la ciudadanía, situación que quieren mejorar como todos los intendentes de la provincia, y destacó que se depende mucho de la coparticipación que les llega desde la Provincia, con fondos tanto nacionales como provinciales. Por eso en el discurso del inicio de sesiones del Concejo Deliberante planteó que de alguna manera tienen que lograr sentar a conversar entre todos la antigua Ley de Coparticipación “porque sabemos que los Estados, tanto el Estado nacional como el Estado provincial y los municipios son la escalera del funcionamiento institucional, pero que a los municipios se le han agregado distintas temáticas y acciones que antes no existían”.
“Antes -continuó- el municipio se encargaba de los servicios públicos pero hoy ha duplicado y triplicado sus acciones en cada comunidad, sabemos que somos el contacto directo de la gente, la primera puerta que golpea es la del municipio para solucionar todos los problemas existentes en su comunidad, lo cual estamos de acuerdo, pero por eso creemos que debemos dar un paso más y actualizar un poquito los ingresos al municipio a través de lo coparticipable”.
Una de las cosas que también hicieron en estos años de gestión fue crear la Oficina de Tierras Municipal, donde encararon el gran déficit de titularidad de la tierra, y pudieron ocuparse en primer lugar de las tierras municipales. El ejemplo es el Barrio 100 Hectáreas donde tienen 557 lotes de personas que viven ahí hace más de cuarenta años, y esto lo encararon en base al plan provincial «Mi Título», dependiente de la Subsecretaría de Tierras del Ministerio de Ecología, y lo adecuaron al municipio junto con el equipo de técnicos propios, y es uno de los proyectos que más satisfacción les da porque nos dijo que poder entregar ese título y observar la cara de quien lo recibe “es realmente emocionante”.
Al consultarle sobre la relación que mantiene con la Provincia, Carlos Fernández nos dijo que “quizás en un comienzo no podíamos valorar la relación con la Provincia porque nos abocamos a solucionar lo local y eso fue lo que nos demandó mucho tiempo”.
“Hoy puedo decir que la relación con la Provincia es excelente, tenemos un acompañamiento y un contacto directo que nos permite a nosotros a veces solucionar cosas que por ahí creemos que son muy difíciles, pero que con el acompañamiento de ellos, por ejemplo esto de los títulos, por orden del gobernador (Hugo Passalacqua), se alivianaron todos los caminos y pudimos acelerar muchísimo los trámites”, destacó.
Otro de los temas consultados tuvo que ver con el de la integración regional y allí manifestó. “Esto nos permitió a nosotros volver a poner a la ciudad de Oberá como el lugar que era para el intercambio con el gran Santa Rosa, donde están 22 ciudades del Brasil integradas, e integrar Oberá con Brasil e integrar Oberá con Paraguay a través de nuestra frontera y de poder relacionarnos íntimamente y llevar la firma de convenios de desarrollo no solamente cultual, sino pensar en las posibilidades económicas que tenemos en este tránsito y en estas fronteras que tenemos tan cerca, estamos a 40 kilómetros del Brasil y a 50 kilómetros del Paraguay, creo que somos un punto de tránsito súper importante para el desarrollo del Mercosur”.
También las cuestiones productivas fueron parte de la conversación, donde el intendente de Oberá nos dijo que cree que falta mano de obra, que falta inversión industrial y que se debe pensar con el acompañamiento no solo de Oberá, sino del Departamento de Oberá, e incluso unido de todo el Centro junto a la Provincia y a la Nación, para desarrollar un gran Parque Industrial en la Zona Centro. Todavía no hay un lugar definido, pero agregó que se están buscando tierras entre 200 hectáreas como mínimo “para que ese Parque tenga un desarrollo constante a futuro y que sirva para los próximos 20 o 30 años”.
Al referirse a la producción primaria local dijo cree que deben trabajar en conjunto, “no solamente por el productor grande sino por nuestros pequeños productores para que de alguna manera se mantenga el vivir en la chacra. Y eso va a llevar a que volvamos a ayudar a nuestros tareferos. Porque ellos también merecen un paréntesis aparte y el tratamiento especial de poder solucionar su problemática social, no solamente para la Municipalidad sino para la Provincia y para la Nación”.
Como corolario Fernández manifestó que para él la transparencia y la honestidad son los pilares que están tratando de mostrar y de esta manera hacer que los obereños los sigan acompañando.
Artículo publicado en la edición N° 34 de Revista ENFOQUE