Los jefes de Estado creen que Argentina y España pueden ocupar espacios globales que antes eran pertenencia exclusiva de la elite mundial.
Mauricio Macri y Mariano Rajoy firmaron un acuerdo estratégico entre Argentina y España que puede significar las bases de un bloque multilateral que incluya a todos los países de Iberoamérica. Macri y Rajoy pretenden que los signos de acercamiento entre ambos países vayan más allá de la presión para lograr un acuerdo Mercosur-Unión Europea o un flujo de capitales españoles que permita recuperar el tiempo perdido por la crisis de seguridad jurídica causada por la expropiación de Repsol. Ambos jefes de Estado asumen que está en proceso un cambio de paradigma geopolítico y que Argentina y España pueden ocupar espacios globales que antes eran pertenencia exclusiva de la elite mundial.
El sueño estratégico de Macri y Rajoy es que Iberoamérica pueda actuar como un solo eje de poder en otros bloques multilaterales que ya tienen presencia de estados que integran la región. En este sentido, para explicitar la intención con ejemplos concretos, se puede pensar que Brasil participa del Brics, México del Nafta y Chile del Tratado del Pacífico. Y entonces, aprovechando esa participación, Iberoamérica puede hacer un juego diplomático más profundo.
Para Macri y Rajoy, la prioridad es el Mercosur asociado a la Unión Europea y el ingreso de inversiones españolas a la Argentina. Una vez superada esta etapa, que llevará muchos meses, se iniciaría un segundo ciclo con el pedido de Argentina al G20 para que se incorpore a España como miembro pleno. En este contexto, no debería sorprender que Macri presente esta propuesta en 2018, cuando se organice en Buenos Aires este foro multilateral.