Fabián Machinsky (36) es de Campo Grande y junto a su hijo, ofrecen su trabajo, sus ganancias y su corazón solidario en esta época en la cual para muchos es aguantar no solo el aislamiento, sino no poder poner el pan en la mesa. Este miércoles 25 entregó 180 kilos de pan. “Lo hice porque ayer (martes) fui a un barrio humilde, le di a los chicos algunas facturas y vi que tenían hambre, me partió el alma”, expresó el joven.
En estos tiempos de cuarentena por el coronavirus que afecta al mundo, son muchas las situaciones que afloran. Algunos aprovechan para hacer lo que no hicieron, otros disfrutan tal vez de una bonita casa que la vorágine no lo permite hacerlo diariamente, pero otros tantos atraviesan por serias necesidades, son aquellos que viven el día a día.
“A mí no me sobra, soy solo con mi hijo, pago alquiler y tengo muchos gastos, pero de chico pasé hambre, sé lo que es. Me prometí que si algún día podía, no dejaría que otro pase hambre”, expresó Fabián.
Es que sí, Fabián es de gran corazón, lo dicen sus vecinos que aseguran que “siempre ayuda, no es ahora. Hace descuentos a los abuelos, regala pan a niños que no tienen familias”, entre otras buenas obras.
Este martes por la noche informó a través de su facebook: «Hola gente de Campo Grande. Se le avisa a todos los vecinos que a partir de mañana (martes) y en los horarios de 9:00 a 12:00 estaré haciendo entrega de PAN en forma gratuita para todos los que realmente lo necesiten, debido a la situación actual que estamos atravesando todos los argentinos. Gracias…».
Así fue que este miércoles entregó 180 kilos. Este hombre no midió las pérdidas, ni la poca venta. Solo vio la necesidad del otro.
Por más gestos como éstos.