Se pondrá en funcionamiento una nueva máquina en la Casa de la Moneda. Los billetes con la imagen del prócer Julio A. Roca están muy deteriorados, pero resulta difícil sacarlos de circulación.
La montaña de billetes que circula en la economía argentina genera cada vez más problemas logísticos, tanto por lo que significa el traslado de toneladas de papel como también por el almacenamiento. Pero mientras el Central acelera la emisión de billetes de alta denominación, al mismo tiempo se puso en marcha un plan para destruir los viejos billetes de 100 pesos con la cara del ex presidente argentino Julio Argentino Roca.
La nueva máquina que funcionará en Casa de la Moneda fue adquirida en realidad por un grupo de bancos privados para buscarle una solución a los graves problemas que está generando el manejo de dinero en efectivo. El objetivo es enviar allí todos los viejos billetes de 100 pesos que sea posible para acelerar su destrucción y que el Central luego deposite electrónicamente los fondos en cada banco que se deshace del cash.
Los «Roca» fueron emitidos por primera vez en 1992 y entonces equivalían a 100 dólares (regía el 1 a 1 de la Convertibilidad). Ahora, ese mismo billete equivale a 6,30 dólares, es decir que perdió más del 90% de su valor en relación al dólar. Y hasta el año pasado, cuando salieron los billetes de 500 y 200 pesos, era el de más alta denominación. Para fin de año el Central planea la salida del billete de mil pesos, que tendrá como imagen un hornero.