El productor de la localidad de Campo Viera Alfredo Henning comenzó con la tarea de cosecha y venta de pacú, carpa y surubí en boca de estanque, desde el sábado pasado. Se trata de una actividad que todos los años se repite en víspera de la Semana Santa. En esta primera etapa y, de un estanque, se extrajo alrededor de más 400 kilogramos, con un promedio de tres a cuatro kilos por pieza y continuarán con la tarea de extracción de otros estanques con los que cuenta la familia Hennig. Esta tarea se replica también en toda la provincia con cosechas y ventas de distintas variedades de pescado frescos.
Campo Viera es considerada como el centro de la actividad piscícola en la provincia desde su inicio en la actividad, en 1999.
Henning explicó que “lo primero que se hace luego de la cosecha es la tarea de desinfección del estanque con cal. Esto se deja dos semanas de tratamiento, luego se recarga el estanque nuevamente con agua y se retoma la siembra de peces y al año siguiente podemos volver a vaciar el estanque si así se quiere».
El predio cuenta con 11 piletas en total, todas con de diferentes superficies; algunos de ellos diseñados como para el “pesca y pague”, comentó Henning. Además agregó que las especies de peces que más se produce son las carpas, pacú y surubí, y otras en menor cantidad” puntualizó.
«Comenzamos con ésta actividad desde 2001, con la ayuda del intendente, gente de provincia y de nación, con todo nuestro esfuerzo y trabajo pudimos alcanzar un máximo potencial, posteriormente pasamos por un mal momento, tuvimos pérdidas muy importantes a causa del mal temporal, pero estamos seguros que volveremos a recuperar lo perdido”, afirmó Alfredo.
El director de Acuicultura del ministerio del Agro y la Producción, Guillermo Faifer, comentó que “el productor misionero logró involucrarse con la piscicultura y diversificó su chacra con esta actividad que le deja un ingreso económico importante. Hoy el censo habla de unos 3.780 productores que se dedican a esta actividad dinámica y que requiere de técnicas y procesos para obtener una producción adecuada. La capacitación es fundamental, como así también el diseño y la planificación del emprendimiento piscícola».
La comercialización de pescado vivo o faenado a “pie de estanque”, permite al productor venderlo directamente al consumidor. Esta estrategia es muy exitosa, pero para que perdure en el tiempo requerirá que los productores se organicen y ordenen sus cronogramas de cosecha, así como también los puntos de venta.