Fueron disparados desde la región noroccidental del país y volaron unos mil kilómetros hacia el Este. Tres de ellos cayeron cerca de las costas japonesas.
Corea del Norte disparó cuatro misiles balísticos que cayeron cerca la costa de Japón e incrementaron la tensión que se respira en la península coreana y Asia nororiental.
En un nuevo desafío a Occidente, el régimen de Kim Jong-un lanzó los cuatro misiles «casi simultáneamente». Tras recorrer unos mil kilómetros hacia el Este, tres de ellos cayeron «en la Zona Económica Exclusiva» japonesa, es decir a menos de 200 millas marinas (370 km) de la costa.
«Esto demuestra claramente que Corea del Norte ha alcanzado un nuevo nivel de amenaza», denunció el premier japonés Shinzo Abe, que luego convocó una reunión del Consejo Nacional de Seguridad. «Los disparos reiterados de Corea del Norte son un acto de provocación para nuestra seguridad y una violación flagrante de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. De ninguna manera podemos tolerarlo», dijo.