Federico Pinedo confirmó a la prensa acreditada que los tres proyectos de ley que ya tienen el visto bueno de los mandatarios provinciales serán tratados en el recinto entre el 29 y el 30 de noviembre. La decisión surgió de un encuentro que el presidente provisional del Senado mantuvo este martes con el jefe de la bancada peronista, Miguel Pichetto, su par de Cambiemos, Néstor Braillard Poccard, y los radicales Luis Naidenoff y Ángel Rozas.
El oficialismo decidió darle más tiempo a la reforma laboral a partir del pedido del titular de la Comisión de Trabajo y Previsión Social, Daniel Lovera, para que todos los actores participen del debate. Así, si bien en principio había acordado que este miércoles a las 16 se iniciara la ronda de invitados con el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, a último momento la misma pasó para el martes próximo (28). Para ese día quedaron entonces las exposiciones del titular del área laboral, los representantes de las CGT y de las dos CTA.
La decisión del peronismo de no aceptar el inicio del debate este miércoles tiene que ver con las fuertes discrepancias expresadas por el sector que responde a Pablo Moyano. El bloque PJ-FpV quiere que ellos y la CGT se pongan de acuerdo. Les hace mucho ruido que el camionero haya hablado de “la Banelco”, tal cual su padre hizo en el año 2000, con la última reforma laboral tratada en el Senado.
Mäs allá de la resolución que tenga esta controversia, el ideal de Cambiemos es que la votación de esa norma se realice recién el miércoles 6, con la actual composición legislativa.
En tanto, este jueves habrá un plenario de las comisiones de Trabajo y Previsión Social y de Presupuesto y Hacienda para dar dictamen al proyecto de reforma previsional y a la ratificación del Pacto Fiscal. A la jornada asistirán los ministros de Interior, Rogelio Frigerio, de Hacienda, Nicolás Dujovne, y gobernadores de todo el país que la semana pasada -a excepción de San Luis- arribaron a un acuerdo con el presidente Mauricio Macri.
En el oficialismo creen no tener dificultades para aprobar el Consenso Fiscal, donde los gobernadores de 23 provincias se comprometieron a bajar los impuestos a los Ingresos Brutos y a los Sellos de manera gradual, y además acordaron una salida al conflicto por el Fondo del Conurbano. En ese mismo texto -que deberá ser ratificado además por las legislaturas locales-, los mandatarios garantizaron su apoyo al proyecto de Responsabilidad Fiscal, que ingresó al Congreso junto con el Presupuesto 2018, y que obliga a las provincias a congelar gastos.
En el caso de la reforma previsional, el Ejecutivo resolvió que los aumentos se apliquen en base a la evolución del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de forma trimestral, en los meses de marzo, junio, y septiembre y diciembre de cada año. Pero además habrá un plus en relación al 5% de la variación porcentual real del PBI.
En las próximas horas, Pinedo activará el diálogo con los líderes de Cambiemos en Diputados, donde se encuentra la otra parte del paquete de fin de año: la reforma tributaria, el Presupuesto 2018 y el proyecto de revalúo de balances. En la Cámara baja todavía no hay un esquema acordado y no está asegurada la aprobación de estas iniciativas antes del 30, fecha de vencimiento del período ordinario.