A pocos más de un año de haber empezado a transitar por el camino de un nuevo deporte en su vida, la misionera Noelia Olivera (30) parece haber encontrado su lugar en el mundo: la cancha de básquet. Lejos de su tierra, pero con el objetivo firme de seguir adquiriendo experiencia minuto a minuto, la misionera se prepara en Buenos Aires con vistas a lo que será su segundo torneo internacional con el Seleccionado Argentino: la Copa América. El certamen se desarrollará del 21 al 31 de agosto en Cali (Colombia) y otorgará cuatro boletos al Mundial de Alemania 2018.
“Soy una de las más nuevas en la Selección y la posibilidad que me da el técnico Carlos Cardarelli de poder participar de la Copa América es muy alentador. Sé que es una increíble oportunidad para aprender, teniendo en cuenta que hace muy poco estoy en el equipo. Quiero sacar el máximo provecho y de esta manera ir puliendo lo necesario a nivel individual y grupal por supuesto”, manifestó Olivera, quien mantuvo un contacto a la distancia con ENFOQUE.
Será una nueva odisea para la oriunda de Panambí, teniendo en cuenta que en el mes de abril había debutado en el Sudamericano de Perú, donde la “albiceleste” logró el pasaje a la competencia continental. “Siento que me falta mucho por mejorar. Hay mucho que aprender y trabajar para estar al nivel de las chicas que están hace más tiempo”, se sinceró. En lo que respecta al torneo en sí, los grandes candidatos a lograr la clasificación a la cita mundialista son Estados Unidos (campeón olímpico), Canadá y Brasil (monarca sudamericano). En relación a ello, la jugadora de la Escuela Municipal de Posadas resaltó que “nuestro objetivo por supuesto es clasificar, son cuatro plazas, si bien apuntamos a Colombia primeramente, la idea y el sueño es poder vencer a Brasil, lo cual sería nuestro mayor logro. Pero todo dependerá de los cruces”.
Para lograr su propósito el combinado nacional realizó varias concentraciones en diferentes puntos del país. Incluso las chicas tuvieron la oportunidad de practicar en la ciudad de Posadas, lo cual significó un hecho histórico para nuestro deporte, sabiendo que nunca antes un seleccionado de básquet en silla de ruedas había llegado a la provincia.
Olivera, que se convirtiera en la primera jugadora de la tierra colorada en ser convocado para defender los colores de nuestro país, es consciente que su rol irá creciendo de a poco a medida que acumule rodaje y experiencia. “En lo personal busco aprender y mejorar. Esto aún sigue siendo muy nuevo para mí y mi objetivo es crecer y ser buena en lo que me destaque para así aportar al equipo”, agregó Noelia, quien sufriera un accidente automovilístico en 2012 que le provocó varias lesiones en diferentes partes del cuerpo, incluyendo fractura de columna.
La armadora dejó en claro que todo lo que está viviendo en un sueño. “Sigue siendo toda una aventura, a veces pasa tan naturalizado todo que uno no cae del todo que está representando a Argentina. Y cada vez que visto la camiseta es una sensación única, me siento orgullosa y feliz. Este es mi segundo torneo internacional así que trataré de vivirlo intensamente y de adquirir toda la experiencia posible”.
(Escribe Maximiliano Acosta, periodista y columnista de ENFOQUE) Artículo publicado en la edición Nº 29 de Revista ENFOQUE