La propuesta, que busca desarmar la iniciativa del ex mandatario Barack Obama, superó el jueves un primer obstáculo en el Parlamento al ser aprobada en dos comisiones de la Cámara de Representantes.
En maratónicas sesiones, el oficialismo consiguió aprobar los dos proyectos de ley presentados esta semana en la Comisión de Medios y Arbitrios, y en la de Energía y Comercio. En la primera les tomó 18 horas de tensos debates con la minoría demócrata y en la segunda 24 horas, según la agencia de noticias EFE.
Entre cafés, chicanas, cruces verbales y descansos para distender el clima y dar lugar a negociaciones informales en los pasillos, los dos primeros textos que comenzaron un largo proceso de desarmar y eliminar la reforma de salud de Obama consiguieron su primera aprobación legislativa.
Los dos proyectos de ley que presentaron los republicanos el lunes por la noche fundamentalmente pretenden generar un sistema de créditos fiscales para incentivar a la gente a comprar seguros médicos y eximir a las empresas de tener que ofrecer una alternativa de cobertura a sus empleados.
Además, los proyectos de ley no incluyen ninguna estimación de cuánto costará la nueva reforma de salud, ni aclaran cuánta gente perdería la cobertura que obtuvo gracias a Obamacare -como se conoció al sistema aprobado por Obama-, lo que ya generó críticas de varios líderes demócratas, mientras que algunos republicanos temen que los textos sean apenas una versión lavada de la anterior reforma.
Un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso, un órgano no partidario, había advertido a principio de año, antes de que asumiera Trump, que la eliminación de la reforma de salud de Obama dejaría sin seguro médico al menos a 18 millones de ciudadanos y eso sólo representaría el primer año.