Por Maurice Closs (*)
Como pocos soy de aquellos que insiste con la necesidad de tomar medidas para atenuar las Asimetrías que tenemos con Paraguay.
Algunos me dicen, para que insistir con un tema que pareciera que al común de la sociedad no le interesa.
Justamente de eso se trata, de tener la capacidad de advertir problemas más allá de lo que piensen las mayorías.
El fin de semana largo me dejo la sensación de que estoy más que acertado y que el problema es más complejo de lo que se presenta a primera vista.
Una visión simple podría decir que este es un problema que afecta a los comerciantes. Entiendo que la situación es mucho más compleja, y que las asimetrías están llevando a una crisis sistémica de Posadas y de la región de frontera.
El sistema está afectado y esto se ve cuando las cosas empiezan a funcionar de manera anormal, y esta anormalidad se empieza a tomar como algo «normal», hasta que por un lado o por el otro revienta.
Quisiera enumerar algunas anomalías que ya nos parecen naturales en esta historia de que decenas de miles de personas pasan por distintas razones a CONSUMIR en Paraguay.
1. Lo más grave es que la plata que se genera en Misiones se gasta e invierte en otro lugar. Eso es algo poco sustentable en el tiempo.
2. Cierre de Comercios.
3. Desocupación
4. Caída de valores inmobiliarios.
Hasta acá todos parecen ser conocidos y estarían limitados al comercio.
5. Ahora bien, esto excede el comercio y hasta se mete con la sustentabilidad del Estado. Así vemos que el municipio de Posadas ve caer su recaudación de Tasa de Comercio a niveles peligrosos. Sin recursos, la Municipalidad verá afectada su capacidad de dar buenos servicios y en el desarrollo.
Pero el sistema está más anormal, incluso llega a afectar comportamientos y costumbres.
6. Lejos está de ser normal que alguien vaya a almorzar a Paraguay y termine volviendo a casa a la madrugada del otro día.
Cuando esto pasa, empieza la anormalidad de buscar culpas, incluso desde la paranoia.
7. No es normal atender cerca de 50 mil cruces en un día.
8. No es un número para el cual estén diseñados ni los procesos, ni la infraestructura, ni la tecnología y menos aún los Recursos Humanos en el cruce fronterizo.
Esto es lo mismo que le pidamos a nuestro organismo que acepte comer y vivir todos los días como si estuviéramos en las fiestas de Navidad. Es imposible, resiste unas horas el desarreglo pero luego se debe volver a la normalidad.
9. Paranoia mediante, se empiezan los unos a acusar a los otros. Así se dice que la culpa es de los de Migraciones porque son pocos y otros afirman que son los aduaneros el problema, sea porque son pocos o sea porque controlan mucho.Ya a esta altura todos sabemos que para muchos esta situación anormal se da debido a que son los comerciantes de Posadas los que arreglan con Aduana y Migraciones para paralizar el puente y así castigar al que cruza para que escarmiente.
Y termino el relato de algunos de los puntos que demuestran el colapso sistémico, haciendo una descripción de la cola.
10. La cola es anormal por donde se la mire. Basta algunos comentarios que tienen que ver donde hacen sus necesidades la gente en esas horas, donde tiran los papeles y las latas de lo que consumen, cuánto pagan a algún VIVO para adelantarse, hasta el letal incidente de perder la vida contra una moto que viene salteando la cola.
En diez puntos trate de dar elementos empíricos para que nos demos cuenta de que esto no va más, que es algo anormal que excede con creces a lo comercial.
Aunque sea en soledad seguiré insistiendo para que se tomen medidas que paren esta situación, y la única manera de que esto ocurra es que Posadas y la frontera pasen a tener menores costos.
Mientras sea más barato Paraguay, esta postal del fin de semana largo se seguirá repitiendo.
La gente seguirá yendo a Paraguay, cada vez estaremos un poco peor y el sistema, por alguna u otra razón terminará reventando.
Estas ideas no tienen una pizca de especulación electoral, muy por el contrario, intento que el tema sea abordado por todos los actores de manera integral, mejor si es urgente antes que tarde y en buena hora que quien traiga soluciones se lleve réditos políticos.
(*) Por Maurice Closs, Diputado Nacional (Frente Renovador)